La vigésimo primera edición de la Subida de Utiel-Trofeo Metálicas Ponce pasará a la dilatada historia de la cita utielana como una de las más espectaculares y competidas. Con el triunfo final de Toni Ariete, el hecho de que nada menos que seis pilotos coparan las primeras posiciones separados por el escaso margen de tres segundos y medio deja bien claro el alto nivel competitivo de una prueba, la penúltima del certamen autonómico, que destacó por su excelente organización y por la gran presencia de público en las cunetas del trazado.
Y es que la lista de inscritos, grande en cantidad y en calidad de los pilotos participantes, ya hacía presagiar que iba a resultar una jornada dominical de lo más interesante en el plano deportivo. Sin embargo, la realidad superó incluso a los pronósticos y el desenlace de la prueba aún fue más emocionante, y en algún caso dramático, de lo esperado.
Al final, el triunfo en Utiel fue a parar a manos de Toni Ariete que, al volante de su CM Plus, se impuso a Nacho Aviñó, con su CM, por el escasísimo margen de medio segundo que, eso sí, fue prácticamente la misma distancia con la que el presidente de la FACV aventajó al tercer clasificado, y primer turismo, que no era otro que el espectacular piloto andorrano Gerard de la Casa, con su Subaru Impreza WRC.
Fuera del podium, pero a menos de tres segundos del vencedor, finalizó el valenciano Raúl Borreguero que, con su habitual Mosler, fue otro de los protagonistas de la prueba y precedió, por menos de una décima, al asturiano José Antonio López Fombona que, con su espectacular Lamborghini Huracán, protagonizaba el incidente más duro, en forma de salida de pista sin consecuencias para el piloto, de la matinal.
El sexteto de cabeza lo completaba el tercer clasificado entre los monoplazas, Augusto Lezcano, que, con el Fórmula Renault, perdía apenas tres segundos y medio respecto de la cabeza de carrera.
Cuarenta pilotos clasificados en el apartado de Velocidad y triunfo de Ángel Vañó en lo que a la Regularidad se refiere en una prueba que, a buen seguro, quedará en la memoria de los aficionados presentes en Utiel.
