El deporte del automóvil tiene a veces, como en muchos otros órdenes de la vida, momentos que destacan por su emotividad y que, seguramente, le dan sentido a nuestra existencia. Buena prueba de ello fue la victoria cosechada en el Slalom FAST Circuit Valencia, cita inaugural del certamen territorial, por Manu Gala que, en dura pugna con sus rivales, brindó el mejor tributo a su padre, el incombustible Manolo Gala, al subirse a lo más alto del cajón con un resultado cosechado al volante del Citroën AX Sport que fuera utilizado por el mayor de los Gala hace, nada menos que, 34 años, un tercio de siglo.
Este resultado, además, viene a confirmar que el trabajo de reacondicionamiento del vehículo, tras localizarlo en territorio balear, realizado por el propio Manolo Gala, ha sido óptimo y ha permitido a su hijo Manu adjudicarse una victoria especialmente trabajada y complicada dada la exigente climatología reinante en la matinal dominical.
Fue en la segunda manga oficial cuando se resolvieron las primeras plazas de la clasificación final ya que Manu Gala mejoraba en mayor medida su crono de la primera manga adelantando, de esa manera, a Josete García Ramos que, con el Hyundai Accent, finalizaba a menos de dos décimas de la victoria y aventajaba, a su vez, en casi dos segundos a Miguel García, con Renault Clio que, además, era el mejor entre los Grupo 1. Por su parte, Roberto Espí se clasificaba octavo y primero entre los Junior mientras que el primer monoplaza era el de Pablo Martínez, con Speedcar, en la quinta posición.
La próxima cita está prevista para finales de agosto en el Complex del Motor d´Albaida.
